Buddy, la nueva versión de SpotMini, es capaz de identificar una puerta cerrada, abrirla en un tiempo récord sin ayuda de nadie y, por si fuera poco, puede cooperar con sus compañeros para que todos pasen.

Cromo - El Observador. Robots que dan saltos mortales y máquinas que se creen mascotas. Y, ahora, la última invención de Boston Dynamics, un perro-robot, es capaz de abrir puertas (y escaparse).

Buddy, la nueva versión de SpotMini, es capaz de identificar una puerta cerrada, abrirla en un tiempo récord sin ayuda de nadie y, por si fuera poco, puede cooperar con sus compañeros para que todos pasen ese obstáculo antes de continuar su camino.

A diferencia de la versión anterior, este SpotMini –que pesa 30 kilos– cuenta con un brazo articulado colocado en la parte superior de su cuerpo y sensores en cada extremidad, cámaras y un giroscopio.

Un robot de la empresa ya contaba con una herramienta de este estilo con la que era capaz de agarrar platos y meterlos en el lavavajillas o incluso tirar la basura al contenedor.

El modelo es completamente eléctrico y tiene una batería con una autonomía de 90 minutos. El brazo se puede programar y controlar de manera independiente, de forma que se puede ajustar la fuerza de agarre según el objeto.