Review Windows 8: empieza la era del post-PC

Por en Software

Sin duda que nos hemos tomado tiempo con el nuevo Windows. Y es que con un cambio tan radical para el sistema operativo más vendido del mundo, se desprenden muchos análisis. La nueva plataforma es el cabecilla de un cambio fundamental en la filosofía y marca que representan Mirosoft, y probablemente se trata del riesgo más grande que ha tomado la compañía desde el lanzamiento de Windows 95. El pasado 26 de octubre, Microsoft dio el puntapié oficial, si bien no inicial, a la verdadera era del Post-PC.


La primera pantalla


Para probar el sistema operativo, utilizamos un dispositivo táctil con una versión OEM preinstalada, y una copia nueva de la versión Pro en un laptop tradicional diseñado con Windows 7. La instalación en este último fue sorprendentemente rápida, tardando menos de 30 minutos y con muy baja intervención directa, todo el momento conectado a internet y tan intuitiva que ya no se requiere ningún conocedor para realizarla. Esto, si se tiene instalado Windows 7, que permite traspasar archivos y software sin pérdida de información. El caso es distinto con Vista o XP, que requieren un poco más de esfuerzo del usuario.


Al momento de iniciarlo por primera vez, se toma el tiempo de mostrar un video tutorial con opciones bastante simplificadas, para luego solicitar una cuenta Windows Live (la misma que se utiliza en Messenger, Hotmail y Outlook), que nos permitirá trasladar nuestras aplicaciones y configuración en cualquier equipo que utilicemos, aunque también está la opción de crear cuentas locales.


Luego de esta primera vez, cada vez que encendamos el PC, será muy rápido, tomando cerca de la mitad del tiempo que en sistemas anteriores. La versión preinstalada lo hizo inmediatamente, como uno se lo espera de un Tablet.
Ya mucho hemos hablado de la pantalla de inicio, que reemplaza al tradicional menú con su interfaz de escritorio, poniendo en su lugar una serie de cuadros animados similares a los de una consola Xbox o de Windows Phone. Usar una cuenta de Windows Live significa que aquí seremos recibidos con nuestro calendario, correo, contactos y SkyDrive inmediatamente sincronizados.


Pantalla de bloqueo y notificaciones

Apoyado en el calendario, mensajería y contactos, Windows 8 ofrecerá notificaciones de las principales redes sociales, de cuenta de correos y hasta de aplicaciones desarrolladas por terceros. En lugar de un centro de notificaciones como en Mac, Microsoft optó por mostrar las notificaciones como mensajes a un costado de la pantalla y en los cuadros individuales de cada aplicación, tal como en Windows Phone.

Cuando se bloquea el computador, aparece una pantalla con una imagen personalizable y que también muestra el número de notificaciones, junto con la hora y algún aviso del calendario, todo acompañado de una imagen de fondo personalizable. Para desbloquear, está la opción de ingresar la contraseña de Windows Live o –en el caso de dispositivos táctiles– crear una secuencia de gestos personalizados sobre una imagen o fotografía.


No lo llames Metro


Navegar el inicio es una tarea increíblemente diferente según el dispositivo. Mientras que en un Tablet es intuitiva y natural, al punto de parecer obvia, en el PC se convierte en una adaptación compleja que requiere de un tremendo esfuerzo mental.

Lo que Microsoft originalmente denominó “Metro” pero que hoy es oficialmente conocido como la “interfaz moderna”, es bastante confuso porque en definitiva no está diseñado para dispositivos con una pantalla tradicional. Documenté esta experiencia en una guía de tres partes (Parte 1 / Parte 2 / Parte 3) que para lograr realizar, tuve que obligarme en forma deliberada a no acceder al escritorio tradicional, en el cual me encontré muchas veces realizando mis tareas cuando olvidaba este autocompromiso.


Usar el escritorio es prácticamente igual a tener Windows 7, siendo de hecho compatible con todos los programas diseñados para ese sistema operativo, con Microsoft asegurando que también es compatible con la mayoría del software de Vista y XP.


Como usuario de Windows Phone, pensé que me sería muy fácil acostumbrarme, pero lo cierto es que el tamaño de la pantalla y el tipo de puntero tienen una influencia enorme, y la navegación con teclado y mouse simplemente no es buena así como viene. Por suerte, algunos fabricantes han actualizado los controladores de los trackpad para los laptops más recientes, lo que añade gestos de Windows 8, pero los demás deberán contentarse con una versión más torpe, a menos de que estén dispuestos a adquirir un periférico certificado para Windows 8.


En un Tablet, la interfaz es mucho más usable, siendo fácil olvidarse del antiguo escritorio siempre que no necesitemos programas antiguos. El sistema se apoya en los bordes, siendo claves para ejecutar acciones como abrir menús, navegar entre aplicaciones y cerrarlas. A la derecha tenemos los “charms”, accesos directos contextuales como búsqueda, configuración y compartir, que se adaptan a cada aplicación (siempre que estemos en la interfaz moderna). A la izquierda desplegamos las aplicaciones, que podemos navegar con solo arrastrar el dedo hacia el centro, y otro gesto para devolverse al borde nos mostrará ventanas de todo lo que está abierto en un momento dado.


Hay una app para eso… o no


Lo nuevo de Microsoft nos distancia del sistema abierto y de libre desarrollo que antes era norma. Siguiendo a la competencia, como Google Play o la App Store, Windows 8 tiene su propia tienda en la que los desarrolladores pueden publicar contenidos. Esta es la única forma de instalar software en la nueva interfaz, mientras que cualquier programa anterior que utilicemos, funcionará a través del antiguo escritorio.


Estas aplicaciones son muy fáciles de instalar y en general pesan muy poco. Hay juegos, diarios y todo lo que hemos llegado a esperar de los dispositivos como smartphones o Tablet. Lamentablemente, y siguiendo la misma lógica, su cantidad es todavía reducida. Como cualquier nuevo ecosistema, tomará su tiempo en llenarse, pero al menos los desarrolladores han demostrado interés. Netflix es por ahora la más importante, con otros desarrolladores como Twitter y Facebook confirmando también versiones en el futuro. Por ahora hay poco más de 10.000 aplicaciones, pero según Microsoft es “la tienda de más rápido crecimiento” que ha existido.


Las aplicaciones que vienen con el equipo, como Xbox Music, Internet Explorer o los hub de contactos o calendario, funcionan de maravilla. El software de música en particular es increíble, permitiendo escuchar o descargar canciones sin costo, aunque con publicidad. En el caso de Internet Explorer 10, sorprende su velocidad, y a pesar de no tener soporte completo para flash (sólo en sitios certificados como YouTube), es notablemente mejor que en sus versiones anteriores, ofreciendose como real alternativa. De hecho, no tuve incentivo alguno para instalar Opera (el navegador que tradicionalmente uso) en el escritorio. Chrome está además disponible en la tienda de apps.


Todo depende sin duda de cómo evolucione el ecosistema. Hoy con la tienda como se encuentra, aún es una apuesta que podría fracasar, pero si finalmente funciona, podría ser el diferenciador que nos haga olvidar para siempre el viejo escritorio.


Integración


Como parte de la nueva filosofía de marca de Microsoft, Windows 8 es el centro de un plan mayor, de un diseño inteligente en el que todo está integrado. Es convergencia medial en su máxima expresión. Por lo mismo, el sistema operativo es mejor aprovechado si es que ya se hace un uso intensivo de dispositivos Microsoft, como el Xbox 360 o un Windows Phone, que se comunican constantemente con el equipo. Por lo mismo, la cuenta Windows Live no es algo tan ligero como pudo ser antes, y cambiar ese correo por otro ya no parece tan buena idea cuando almacena toda nuestra libreta de contactos del teléfono y todos nuestros logros de videojuegos.


El aspecto negativo de esto es que la integración con dispositivos de la competencia, como Apple o Google, sufren en comparación. El calendario y en general las apps de Google no funcionan muy bien en el software de Microsoft, y dependerán en general del acceso a través de web.


El Tablet PC vs el Tablet recreacional


El hecho es que todo este nuevo diseño es un signo de divergencia con la competencia. Mientras Android y iOS son sistemas que se comparten entre Smartphone y Tablet, Windows 8 lo hace entre PC y Tablet. Para Microsoft, los dispositivos de pantalla mediana son el centro y no accesorios de la experiencia digital, y esto no puede estar mejor expresado que en puertos USB: mientras el iPad y el Nexus “se conectan” al PC, los Tablet con Windows 8 “reciben la conexión” de los teléfonos y otros dispositivos. Es decir, en el ecosistema de Microsoft, las tabletas son un PC y no necesariamente un simple complemento de otro dispositivo mayor.


Microsoft ha llamado a esto la disputa de la “Tablet recreacional” versus la funcional, o Tablet PC. De esta manera los equipos táctiles con Windows 8 tienen una orientación de preferencia horizontal y además ofrecen la opción de un teclado externo, a diferencia de la posición vertical de libro que tradicionalmente hemos visto.


Si esto es mejor o peor, dependerá del consumidor, pero difícilmente estas dos formas de ver a la tercera pantalla conviven. Cada uno es una apuesta diferente, y está por verse cómo la industria reaccionará en torno a ellas.


En resumen


Windows 8 es el dos caras de los sistemas operativos. Mientras que en dispositivos táctiles es un serio contendor, en un PC antiguo es una montaña por escalar. La tienda de aplicaciones será el verdadero responsable de su éxito en equipos más livianos como Tablets, mientras que su fuerte integración con el ecosistema Microsoft será un atractivo para usuarios de Xbox y teléfonos Windows. Si vas a utilizar Windows 8 en un equipo Post-PC, sea laptop o Tablet con pantalla táctil y diseñado con el sistema operativo en mente, es totalmente recomendable, ya que ofrece lo mismo que Windows 7 y más, de forma visualmente cómoda y atractiva.

En tanto, en un equipo antiguo, todo dependerá de si realmente se le dará uso a la nueva interfaz, y de si estamos dispuestos a pagar por un nuevo mouse o trackpad que tenga gestos de Windows 8 habilitados. Si nos encontramos volviendo al escritorio constantemente, no hay razón para actualizarse de otra versión.

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