La privacidad está de moda. La preocupación más importante para este 2014 sólo se hará más grande con productos que cada vez más invaden aspectos más íntimos de la vida cotidiana, tal y como se proponen los dispositivos vestibles que invadirán al mercado los próximos meses. Es en ese contexto que una idea como el Blackphone hace perfecto sentido.

Un teléfono diseñado para ofrecer privacidad y protección de datos al usuario, y lanzar el teléfono "más seguro del mundo" a nivel de consumidores son parte de la promesa de sus creadores, que aseguran ofrecerá protección contra hackers y gobiernos por igual.

Su sistema operativo se llama PrivatOS, que no es más que una versión modificada de Android que incluye aplicaciones Silent Circle para mensajería, llamadas y contactos encriptados, busqueda anónima, navegación segura, almacenamiento en la nube cifrado, analizador de WiFi y capacidad de recibir tarjetas SIM de cualquier operador a nivel global.

Sin embargo, no hay que olvidar que en escencia su plataforma sigue siendo Android, el sistema operativo móvil más vulnerable del mercado. Esto ya ha generado una cuota de escepticismo en círculos técnicos. Además, por muy efectivas que sean las apps de Silent Circle, estas sólo funcionan cuando ambos lados de la comunicación las utilizan, y no protegen al usuario fuera de ellas. Es decir, la interacción por otros medios y el uso de otras aplicaciones sigue siendo igual de vulnerable.

El Blackphone saldrá a la venta en junio de este año a US$629, aunque una preventa está abierta en su sitio web oficial desde ya. Sus creadores, y la gran mayoría de expertos en seguridad señalan que no existe algo tal como un dispositivo invulnerable, pero afirman que "este teléfono hace una gran diferencia en privacidad en relación con uno tradicional".