El teléfono modular de Motorola y Lenovo trae finalmente al mercado la opción de teléfonos modulares. Pero, ¿es esta tecnología realmente atractiva para los usuarios?

Uno de los teléfonos más esperados del año era sin duda el modelo Moto Z de Motorola. ¿Por qué? Este equipo, desarrollado por Lenovo, no apuesta solamente a un buen rendimiento o a una poderosa batería, sino que también a un diseño innovador y a traer a la realidad el concepto de "teléfonos modulares".

El modelo de gama alta de Motorola destaca a primera vista por su diseño. Es un equipo sumamente delgado, con solamente 5,2 milímetros de grosor; está equipado por una estructura de aluminio ultra fino pero que sacrifica algo vital para muchos: la entrada jack para audífonos.

No obstante, este cambio -que también está presente en otro modelos como el iPhone 7- puede ser olvidado con su gran pantalla de 5,5 pulgadas y resolución Quad HD; su nuevo sensor de huellas digitales; y un procesador, que entrega un gran rendimiento, pero promedio en relación a otros equipos gama alta del mercado.

Algo que no destaca, lamentablemente, dentro del equipo es su cámara. Este elemento de 13 megapixeles de resolución entrega un rendimiento bajo en comparación con otros equipos, como el Galaxy S7 o el iPhone 7, especialmente en condiciones de poca luz. En este campo solamente entrega imágenes estándar, por lo menos sin su Mod de Hasselbad.

Los mods: el verdadero cambio del Moto Z

Si bien este teléfono puede llamar la atención por su características técnicas, definitivamente lo que lo diferencia de otros dispositivos en el mercado son sus acesorios. Estos complementos, conocidos como Mods, puede dar un valor extra al equipo dependiendo de lo que el usuario necesite.

Su modo de uso es sumamente simple. Solamente debes acercarlos al Moto Z y se acoplarán directamente con el teléfono, por medio de imanes y conectores del mismo teléfono, y se verán como si fueran una carcasa extra. Además, este es el único paso, ya que no requieren una configuración previa o algo por el estilo, sino que pueden ser utilizados inmediatamente.

Dentro de los Mods disponibles nos encontramos con el Insta-Share Projector, que puede convertir tu teléfono fácilmente en un proyector; el Moto Mod JBL SoundBoost, que le entrega una doble bocina de alta calidad al Moto Z; un batería Incipio que le brinda hasta casi un 80% de carga extra al teléfono; y una “cámara” Hasselblad True Zoom, que le da10x de zoom óptico al dispositivo.

Todos estos Mods son tanto fáciles de usar como seguros. Es decir, no se desprenden fácilmente del teléfono, no requieren configuraciones extra y además, tienen carga independiente, por lo que no se comerán la batería de tu equipo. No obstante, la pregunta es: ¿realmente necesitas alguno de estos componentes extra?

Cada uno de los Mods están pensados para potenciar el Moto Z -que ya tiene un excelente rendimiento- especialmente para cada usuario, dependiendo si quieren un mejor sonido, una cámara más potente o mayor vida a nivel de batería. No obstante, se presentan como una opción de vanguardia en un mercado donde solamente tiene un competidor indirecto, el teléfono LG G5.

Sin duda, el diseño modular puede ser el futuro de los smartphones. Y el correcto uso de los Mods, y su simpleza, hacen de este teléfono el más innovador del 2016. Sin embargo, ¿es algo que el público está dispuesto a comprar en este minuto? Solamente sus futuros resultados nos podrán dar esa respuesta.