El teléfono se ubica en la gama premium, con un excelente diseño, una gran cámara y un buen rendimiento. Pero, ¿vale la pena comprarlo?

El mundo de Android está lleno de alternativas, algunas mejores que otras de acuerdo a la gama en que se encuentran. Este es el caso de la LG G7 ThinQ y la división premium de dispositivos. 

Este equipo cuenta con un diseño delgado y cómodo en la mano a pesar de su gran tamaño. Al igual que el iPhone X, tiene un notch en su parte superior de su display y un sistema de cámara dual. No obstante, se diferencia de este modelo con su parte frontal y trasera de cristal, y el elegante acabado de su lado posterior. 

Uno de las decisiones extrañas a nivel de diseño es un botón en su parte izquierda, especializado para Google Assistant. Esta decisión se explica en el foco del teléfono por la inteligencia artificial, y que se puede ver también en el funcionamiento de la cámara. 

En tanto, el equipo incluye su lector de huella digital en la parte trasera, una decisión ya común en el mercado, y que es cómoda para varios usuarios. Además, incluye un botón especializado para apagar y encender el celular en su costado derecho, al otro lado del control del volumen.

Otro punto a su favor, es su resistencia al polvo y al agua gracias a su especificación IP68, y su pantalla LCD de 6,1 pulgadas, ratio 18:9, con extra brillo (1000 nits), gran nitidez y excelente resolución.

Finalmente, en el caso del panel, una de las características más llamativas del teléfono es su funcionalidad “segunda pantalla”. Esta herramienta está pensada para disimular el notch de la pantalla, por medio de una línea en negro o con distintos colores y degradados. 

A nivel de rendimiento, el equipo cumple todas las expectativas gracias a su procesador Snapdragon 845 y sus 4GB de RAM. Un elemento que permite correr la interfaz del teléfono y prácticamente cualquier video, juego o aplicación, sin problemas y con total rapidez.

En cuanto a la batería, el equipo cuenta con 3000 mAh que entregan una autonomía promedio, no sobresaliente, pero sí básica para superar un día completo de uso.

Con respecto al área de la fotografía, el equipo cuenta con una doble cámara, una con gran angular. Esto significa que el equipo no incluye un zoom óptico, a diferencia de muchos otros dispositivos similares en el mercado. No obstante, el LG G7 ThinQ entrega excelentes resultados a nivel de imágenes gracias a su estabilización mecánica, autoenfoque láser y sistema integrado de inteligencia artificial, que puede detectar hasta 19 escenas y aplicar ajustes básicos para obtener mejores imágenes según cada caso.

Uno de sus puntos más altos es su modo manual, que permite ajuste personalizado de todos sus elementos, casi de manera profesional. Entregando muy buenos resultados en todo tipo de escenarios, incluso en aquellos con poca luz.

En sí, el LG G7 ThinQ es un móvil que entrega muy buenos resultados aunque a un precio que no es precisamente bajo. Como buen modelo de gama premium, el equipo cuenta con un excelente diseño, un buen rendimiento y un resultado de cámara sobre el promedio.

No obstante, el equipo también tiene puntos bajos, como este renombrado foco por la Inteligencia Artificial, que finalmente solo se ve en servicios como Google Assistant, Google Lens, y la cámara, pero no a nivel global en el equipo. 

Esto no quiere decir que sea un mal equipo. Por el contrario, es probablemente uno de los teléfonos más destacados dentro de su categoría. ¿Su único problema? No es un teléfono barato, por lo que sin duda es una apuesta para sus compradores. No solo por su valor, sino también porque LG si bien entrega buenos resultados, no es precisamente una marca líder en el mercado. Y eso, sin duda, puede inquietar a cualquier comprador dentro del mercado.