Aunque no podríamos situarlo en la vanguardia tecnológica, Apple logró desarrollar un producto sumamente atractivo y eficiente, elevando sus propios estándares y con una triple cámara como estrella.

El segundo semestre del año, especialmente las fechas cercanas al cierre del mismo, tienen un sabor especial para los fanáticos de Apple. Muchos ya pueden oler desde las vitrinas los últimos modelos, mientras la publicidad digital no deja de tentarlos con las fotografías y las bondades del reciente lanzamiento.

El momento ha llegado. Con la disponibilidad del nuevo iPhone 11 y sus respectivas variantes en la gran mayoría de los mercados de Latinoamérica, te contamos cuáles son sus principales atractivos y qué aspectos requerirían de mayor atención.

Para el análisis centraremos nuestra atención en el iPhone 11 Pro, el modelo de mayor gama que en esencia es idéntico a la versión Max, exceptuando por el tamaño de la pantalla y la batería

Triple cámara: la gran protagonista

Varios meses antes de su lanzamiento oficial se venía hablando sobre la inclusión de una tercera cámara principal en el próximo iPhone. El desafío era ineludible, pues prácticamente todos los otros fabricantes ya tenían modelos con tres o más cámaras incluso. Apple llegó tarde, pero no defraudó y este es el principal motivo que justifica la renovación del iPhone respecto a su antecesor, el iPhone Xs.

El iPhone 11 Pro estrena así un sistema revolucionario de tres cámaras: ultra gran angular, gran angular y teleobjetivo. Este sistema es completamente nuevo permite obtener fotografías con nuevos ángulos y enfoques graficados de manera más sencilla con el “zoom” 0,5x y 2x. Naturalmente, estos lentes están alineados con iOS por lo que logra una experiencia rápida, cómoda y muy eficiente para los distintos modos de imágenes como el retrato y el noche que destacan particularmente en este caso. Así, el mayor campo visual, un sensor potenciado para mejorar las capturas con poca luz, el HDR inteligente con flash True Tone así como el sistema neural para procesar las fotos convierten al iPhone 11 en un excelente smartphone fotográfico.

Además, cada una de las cámaras del sistema graba videos 4K con rango dinámico extendido y estabilización cinemática de video. Y, respecto a la cámara selfie, ha sido denominada como TrueDepth, de 12 MP, pues ofrece un campo visual más amplio para tomar selfies sin desestimar el HDR.  Finalmente, puede grabar video 4K de hasta a 60 cps y video de cámara lenta de hasta 120 cps.

La nueva cámara TrueDepth de 12 MP ofrece un campo visual más amplio para tomar selfies y el HDR Inteligente de última generación permite lograr fotos más naturales. Los videoselfies tendrán un look completamente nuevo con la cámara TrueDepth que ahora graba video 4K de hasta a 60 cps y video de cámara lenta de hasta 120 cps.

Pantalla y diseño a la altura

Para acompañar una buena cámara es necesario tambińe una buena pantalla y en ese aspecto Apple sabe mucho. La nueva pantalla Super Retina XDR es la pantalla pro más brillante en un iPhone hasta ahora. Ofrece una experiencia visual HDR envolvente para ver películas y otros videos en alta definición con un brillo de hasta 1,200 nits que se percibe a simple vista. Para completar la experiencia multimedia, además tenemos altavoces que no pasan desapercibidos, pues tanto el volumen como la calidad del sonido es muy alta.

En cuanto al diseño del equipo, verás que es muy similar a sus antecesores. La parte delantera tiene un notch pronunciado, pero que se justifica por el buen funcionamiento del sistema de reconocimiento facial Face ID. Lo más llamativo está atrás, para bien y para mal. Por un lado, el acabado en el nuevo color verde medianoche con diseño de vidrio y acero inoxidable mantienen al equipo libre de la acumulación de huellas digitales u otros agentes similares. Por otro, nos encontramos con el criticado diseño del sistema de cámara triple que asoma un tanto tosco o poco cuidado en las terminaciones, aunque como en la mayoría de los casos, es cosa de gustos, pues no representa un problema mayor.

Rendimiento asegurado

Integrado con el procesador A13 Bionic, el iPhone 11 logra respaldar todas las operaciones y tareas que acostumbramos consumir. Según la compañía, cuenta con un CPU y un GPU hasta un 20% más rápidos que con el chip A12 y está diseñado para el aprendizaje automático. Además,  tiene un Neural Engine más veloz para el análisis de fotos y videos en tiempo real, así como aceleradores de aprendizaje automático que permiten que el CPU tenga un rendimiento de más de 1 billón de operaciones por segundo.

Aplicaciones y juegos con realidad aumentada, transmisiones en vivo, ediciones de video e imágenes, además de la navegación clásica son soportadas sin mayores problemas al menos durante las primeras semanas o mes de uso.

La batería, por su parte, también refleja una mejora evidente. A diferencia de los modelos de hace dos o más años, el iPhone 11 deja atrás ese constante dolor de cabeza de la duración de la carga. Ahora no será sorpresa que termines el día sin necesidad de volver a cargarlo para iniciar el siguiente. Aunque el sistema de carga rápida no es tan efectivo como el de otros fabricantes, pues toma más de una hora acercarse a los porcentajes topes, la experiencia es satisfactoria.

Finalmente, respecto a iOS 13, la navegación sigue siendo fluida y presenta como, quizás la mayor novedad, la inclusión del Modo Oscuro, un look que aporta una nueva estética a la interfaz y hasta ahorro de energía.

Entonces...

El iPhone 11 es sin dudas el equipo más completo que ha lanzado Apple. De haber sido presentado en 2018, probablemente habría acumulado muchos reconocimientos como mejor smartphone del año. Lo cierto es que su llegada fue tardía, pero sus prestaciones pueden hacer olvidar esa consideración.

Lo que quizás sea más difícil de olvidar es el precio, pues todas estas características del último modelo se hacen valer. Aunque el impacto no es tan notorio en su precio de lanzamiento oficial: US$999 para el iPhone 11 Pro, en Latinoamérica sí podemos notar más sus diferencias, lo cual lo puede hacerlo menos atractivo respecto a otros competidores.