Descubre las potencialidades que ofrece el monitor de última generación de Fitbit. ¿Qué tan eficiente y atractivo en funcionalidades llega a ser este reloj concebido para deportistas?
Fitbit es uno de los actores relevantes y especialistas en el mercado de los dispositivos para el monitoreo de actividades físicas y deportivas. Así, el reciente lanzamiento de la compañía, el Fitbit Blaze, quiere convencernos de eso.
A continuación repasaremos algunos de los principales aspectos que descubrimos en este vestible durante el tiempo que lo tuvimos de prueba para que puedas hacerte una idea de qué tan ventajoso puede llegar a ser.
Primero, ¿de qué estamos hablando?
¿Se trata de un reloj, un smartwatch? ¿una pulsera deportiva más avanzada? ¿o un monitor especial que no es ni lo uno ni lo otro? En esencia este dispositivo es un reloj. Aunque claro, no de los tradicionales. Pudiera presentarse como un smartwatch, es decir, con funcionalidades inteligentes, pero lo cierto es que sus prestaciones lo elevan más bien como un monitor avanzado de actividad física que como un reloj inteligente que pretende competir con otros vestibles Android, Samsung o incluso de Apple.
En este contexto, el Fitbit Blaze debe ser concebido primordialmente para usuarios deportistas, que no tienen tanta necesidad de estar conectados y en la vanguardia de las funcionalidades que ofrece la sincronización con el smartphone.
Una vez conectado por Bluetooth al teléfono, el Blaze pone énfasis en las funciones de monitoreo y rendimiento deportivo, no así en la compatibilidad de aplicaciones del smartphone. Por ejemplo, en el modo de visualización de pantalla del reloj tienes sólo cuatro opciones, al menos durante el período de prueba. Tampoco puedes acceder a una tienda donde descargar más de estas ni otras herramientas.
Lo que sí ofrece es la visualización de ciertas notificaciones. Aunque no es un sistema infalible, pues muchas veces estando sincronizados los mensajes que llegaban al smartphone no se veían en el Blaze. Entre las notificaciones que se visualizarían están los mensajes, llamadas y avisos del calendario, pero servirá solo para lectura, pues no podrás responder o interactuar con las mismas.
Un potencial marcado
Como monitor de actividad física, el fitbit Blaze es una gran mezcla de deporte, tecnología y diseño. Partiendo por este último, tiene una estructura bastante particular pues no hablamos de un reloj de una sola pieza, sino de un equipo modular. Por un lado está la pantalla táctil OLED de 1,25 pulgadas y por otro, un marco metálico unido a la correa. Esta última tiene componentes de un material diseñado para que al hacer actividad, estar en movimiento y transpirar, no sea ninguna molestia, tanto por su peso como flexibilidad. Pero además, si a ese diseño le quieres dar mayor elegancia, la correa de cuero café cumplirá sin duda tal propósito.
Entre las funcionalidades de salud y acondicionamiento físico de Fitbit Blaze encontramos el monitoreo de la actividad cardiaca; reconocimiento automático de los momentos de ejercicio; monitoreo del sueño y la visualización en pantalla de rutinas de ejercicios que podemos seguir. Allí encontrarás FitStar, una especie de entrenador personal que te guiará con el entrenamiento. Además, permite, entre otras cosas, incluir recordatorios que invitan al movimiento, reconocimiento automático de los momentos de ejercicio, monitoreo a lo largo del día de toda la actividad y el sueño.
Otro de los puntos fuertes del reloj es la duración de su batería. Cargada al 100% durará tranquilamente unos tres días, dependiendo del uso; según la compañía, esta puede alcanzar hasta los 5 días. Además, a diferencia de la mayoría de los smartwatches más avanzados del mercado, el Blaze es compatible con Android, iOS y WIndows, lo que se traduce en unos 200 dispositivos distintos.
Finalmente, el precio de mercado de este vestible lo pone en una media interesante. No está entre los más caros ni entre los equipos de entrada. A modo de referencia, al mercado chileno llegó en 189.990 CLP, es decir, unos US$280.
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