"La industria de los videojuegos ya no puede tomarse más a la ligera, puesto que, por ejemplo, en 2020 facturó en todo el mundo, más que el cine y los deportes juntos en Estados Unidos".

* Por Giancarlo Benedetto, Intel Chile Country Manager y Americas Retail Sales Director

El gaming es un fenómeno que ha crecido exponencialmente en los últimos años. Si bien, la pandemia ha aportado a que las personas se acerquen aún más al mundo de los videojuegos, los hábitos de consumo a nivel mundial se han visto potenciados con cada año que pasa. 

No hay que ir demasiado lejos para encontrar que dicho aumento en gaming es una realidad. Chile está entre los cinco países del mundo que más crecimiento de PC, ha tenido en 2021 en materia de ventas retail. Además, es el país de la región que más ha crecido en la materia en los últimos años, y, eso esperamos que esta tendencia se mantenga en el futuro.

El gaming pasó de ser un hobby de nicho, a ser una forma de vida. Jugadores de todo el mundo se pueden dedicar profesionalmente a competir en los e-sports más populares del momento, mientras que otros pueden alcanzar la fama a través de streamings, frente a audiencias compuestas por miles de personas.

No solamente se trata de formar carrera dentro del mundo del gaming, ya que el jugador promedio posee atributos sumamente relevantes a considerar. Dentro de lo que se refiere a cantidad de horas dedicadas a jugar, los jugadores encuestados para un estudio de NPD Group y Sensor Tower en Estados Unidos y Canadá, reportaron un 42% más de tiempo de juego en 2020 al compararlo con el año anterior, promediando ocho horas a la semana.

La industria de los videojuegos ya no puede tomarse más a la ligera, puesto que, por ejemplo, en 2020 facturó en todo el mundo, más que el cine y los deportes juntos en Estados Unidos. Para 2020, la industria del videojuego tenía un valor estimado de casi US$ 160 mil millones, lo que representó un incremento de 9,3% con respecto al 2019. Las estimaciones actuales apuntan a que para el 2025, el valor de la industria haya alcanzado los US$ 268 mil millones.

Es importante entender que ahora cualquier persona se puede sentir atraída hacia el mundo de los videojuegos, y, de hecho, con tan solo contar con un smartphone, ya puedes ser un gamer. La pandemia del coronavirus supuso, como era de esperar, un aumento en lo que se refiere a cantidad de jugadores móviles a nivel mundial, existiendo más de 300 millones de personas que juegan de manera frecuente en su celular, solo considerando a Estados Unidos y Canadá.

Para estar a la vanguardia y responder de forma efectiva a los avances en la penetración de los videojuegos a nivel mundial, tanto Intel, como las empresas del sector deben tener una respuesta anticipada a las necesidades que vayan presentándose con el paso de los años dentro de la industria.

Con la llegada de más jugadores, los constantes avances en desarrollo de videojuegos y las altas expectativas de desempeño, Intel se ha visto felizmente desafiada a estar a la altura. Es por lo anterior que desde la compañía se han buscado respuestas dentro del mundo de las tarjetas gráficas con Arc y el segmento de las laptops con la serie H.

El foco del desarrollo en esta industria siempre está puesto en que los jugadores de distintos niveles de uso, sin importar la plataforma, puedan acceder a la mejor experiencia. Es importante que los productos y tecnologías que se desarrollen vayan en sintonía con el usuario, para que el proceso de adaptabilidad sea lo menos disruptivo posible, tanto para nuevos jugadores como para los veteranos de la industria.

Las tecnologías que presentamos no solo se ven presentes en lo que es un hardware más potente, sino que este viene acompañado de variadas y potentes tecnologías que tienen por objetivo dar solución a los diversos ámbitos que componen una experiencia de juego óptima. El desarrollo que proponemos en la industria gamer está pensado en 360°, partiendo por procesadores potentes, pero continuando con agregados en diversos aspectos que permitan jugar al mejor nivel, sin interrupciones ni preocupaciones.

El futuro de los videojuegos son los mismos jugadores, por lo que mientras ellos existan, los desarrolladores estarán con la creación de dispositivos y nuevas tecnologías que puedan estar a la altura y responder de forma efectiva a todas las necesidades en velocidad de procesamiento, conectividad y muchos otros factores que influyen a la hora de jugar.