Las tres “A” de la Inteligencia Aplicada, clave para la transformación cognitiva

Por en Innovación & Ciencia

"La Inteligencia Aplicada ofrece una gran oportunidad, ya que es un enfoque cognitivo, rápido y eficaz para recopilar, procesar y analizar datos, crear conocimientos que ayuden a identificar oportunidades claras para actuar y automatizar esas acciones para desbloquear el valor comercial".

*Por Francisco Rojas, Líder de Applied Intelligence de Accenture Chile

Más que nunca, la capacidad de competir de las empresas depende del valor que pueden agregar a su cliente, para obtener su lealtad. Para desbloquear este valor, se necesita entender el negocio a partir de los datos, en definitiva, entender el comportamiento de sus clientes y cómo se vinculan éstos con su oferta de valor, para así poder robustecer el vínculo a partir de acciones de relacionamiento asertivas y en tiempo real. Desde este punto de vista, la analítica, inteligencia artificial y la automatización son palancas clave para construir activos que ayuden a construir ese vínculo y, por consiguiente, capturar las oportunidades que muestran con alta frecuencia, los mercados competitivos.

Hoy hay dos tipos de negocios: los nativos digitales y los que se transforman. Para empresas como Amazon, Uber y Spotify, el mundo digital es su base de operaciones. Todo su ADN es digital. Competir en un mundo online es natural para ellos. Pero para las empresas sin estos comienzos digitales, la historia puede ser muy diferente. Después de todo, la transformación digital no es fácil y hay diversas opiniones y enfoques sobre ella. En ese aspecto, la transformación cognitiva es clave para avanzar. 

Si bien las empresas actuales pueden tener a su disposición una deslumbrante gama de soluciones y recursos, también se enfrentan a una impresionante diversidad de desafíos. Las expectativas de los consumidores se han vuelto líquidas, lo que significa que ahora tienen que competir a nivel de experiencia o se arriesgan a ser víctimas de la disrupción. Mientras tanto, la tecnología está evolucionando tan rápidamente, que parece casi imposible mantenerse al día y, sin embargo, eso es exactamente lo que el mercado espera que hagan las empresas. 

En ese contexto, la Inteligencia Aplicada ofrece una gran oportunidad, ya que es un enfoque cognitivo, rápido y eficaz para recopilar, procesar y analizar datos, crear conocimientos que ayuden a identificar oportunidades claras para actuar y automatizar esas acciones cuando sea posible para desbloquear el valor comercial. Se compone de tres soluciones entrelazadas: analytics, inteligencia artificial y automatización. Juntas, forman las tres A de Inteligencia Aplicada, ayudando a las empresas a encontrar formas novedosas de deleitar a los clientes mediante el uso de tecnología inteligente para amplificar el ingenio humano. Las tres soluciones tienen como objetivo añadir valor en un sentido significativo e intrínsecamente conectado, compartiendo los datos como un denominador común. 

1. Analytics. Los datos tienen el potencial de decirte todo lo que necesitas saber sobre el mundo que te rodea e informar tu proceso de toma de decisiones. A primera vista, eso parece hacerlo valioso. Pero por sí mismo, los datos son sólo datos. Es materia prima. Sólo se vuelven valiosos una vez que han sido cuidadosamente analizados e interpretados. Y eso significa que el valor de los datos está determinado por la fuerza de las soluciones analíticas con que cuente la compañía.

Para extraer el valor de los datos y realizar todo su potencial, las empresas tendrán que invertir en analytics primero. Tendrán que tomar medidas para salvaguardar la calidad de los datos y asegurarse de que estén disponibles en el lugar y el momento adecuados. Además, las organizaciones necesitarán del talento indicado para preparar la data para su procesamiento, correlacionar los distintos flujos de información y visualizar los resultados adecuadamente para poder compartirlos de forma efectiva. Y también deberán habilitar su talento con soluciones e interfaces de análisis centradas en el usuario.

2. Inteligencia Artificial. En los últimos años, la inteligencia artificial ha hecho enormes progresos. Impulsa una amplia gama de soluciones ubicuas, desde altavoces inteligentes que pueden entender el habla de los usuarios hasta teléfonos inteligentes que pueden reconocer las caras de los usuarios. Y para todos estos impresionantes avances en computer vision, el procesamiento del lenguaje natural y el deep learning, la aplicación de estas tecnologías está todavía en sus inicios. Cualquiera puede ver que la IA tiene un potencial masivo y mucho espacio para crecer. ¿Pero qué significa eso realmente para los negocios?

La clave aquí es entender exactamente lo que la inteligencia artificial ofrece: entrega a las máquinas habilidades que tradicionalmente han sido del dominio de los humanos. Esto proporciona a las empresas lo mejor de ambos mundos. Con un programa que no sólo reconoce rostros, sino que interpreta las emociones que muestran, una empresa podría ser capaz de señalar más eficazmente qué interacciones deleitan a sus clientes. Las computadoras no tienen problemas como los humanos. Nunca se cansan, nunca pierden la concentración y pueden realizar cálculos en un abrir y cerrar de ojos, permitiendo tiempos de respuesta más rápidos mientras liberan a sus compañeros humanos para perseguir otros desafíos. Además, la IA no tiene que perpetuar los prejuicios humanos, especialmente cuando ha sido diseñada para ser responsable y justa.

3. Automatización. La analítica avanzada proporciona los conocimientos de alta calidad que necesita la empresa para entender su negocio, su mercado y sus clientes. Las modernas soluciones de inteligencia artificial pueden entonces tomar decisiones de negocios autónomas basadas en esos conocimientos. Pero decidir mover una montaña porque se sabe por qué debe ser movida es sólo una parte de la ecuación. Se necesita la palanca correcta para moverla. La automatización proporciona esa palanca. En cierto sentido, la automatización es lo que pone lo "aplicado" en la Inteligencia Aplicada. Completa la trinidad de las “A”, proporcionando los medios necesarios para automatizar aspectos clave del negocio principal, convirtiendo así el valor teórico en valor real.

Esto es una parte fundamental de lo que hace que la Inteligencia Aplicada funcione. Analytics y la inteligencia artificial ayudarán a diferenciar entre las tareas que se adaptan mejor al talento humano y las que se adaptan mejor a las máquinas, pero sólo la automatización garantizará que estas últimas se lleven a cabo realmente.

La integración de la Inteligencia Aplicada en el negocio ayudará a las empresas a crear las condiciones adecuadas para su transformación digital, poniendo a su disposición el poder combinado de analytics, la inteligencia artificial y la automatización. Pero para cosechar esas recompensas, se debe avanzar ahora y con un foco integral del negocio.

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