Muchos de nosotros hemos sido testigos del crecimiento del comercio electrónico. Si nos preguntaran qué cosas compramos por este medio hace unos cinco años, seguramente no serían muchas. Pero si la pregunta se remontara al año pasado, muy probablemente la cifra evidenciaría el progreso de esta práctica que nos es muy común por estos días.

Pero, más allá de nuestras percepciones, hoy contamos con cifras que nos ayudan a dimensionar el crecimiento que ha tenido el e-commerce y así poder proyectar la expansión y el desarrollo del mismo para los próximos años.

Por ejemplo, según reveló  el último Estudio de Medios de Pago realizado por Tecnocom, el  comercio electrónico en América Latina ha experimentado un crecimiento exponencial durante los últimos cinco años, en los que se ha cuadruplicado el volumen de ventas, con una Tasa Compuesta de Crecimiento Anual –CARG– del 34% en el periodo 2009-14. Aunque hablamos del cierre de 2014, se trata de las cifras más recientes con las que cuenta la compañía, las cuales les permite a su vez, analizar el despliegue de estas tecnologías en nuestra región.

Una de las revelaciones más interesantes del informe da cuenta de las cifras registradas por país. En esa línea, como no es sorpresa, Brasil concentra la mayor parte del valor de las ventas. En 2014, el país ingresó US$15.200 millones en ventas de comercio electrónico al por menor (según datos de la Cámara Brasileña de Comercio Electrónico).

Le sigue en el segundo lugar México, a una distancia cada año más estrecha y con ventas totales de US$12.200 millones según la AMIPCI, anotando un crecimiento interanual del 32%.

De aquí en más bajamos súbitamente en volumen de ventas, debido principalmente al tamaño de mercado del resto de los países. Así encontramos a Chile, que se sitúa por primera vez, y superando a Colombia, en el tercer lugar regional, donde el comercio electrónico facturó cerca de US$4.300 millones, cifra que más que duplica la registrada el año anterior. Colombia, en tanto, contabilizó US$3.500 millones y Perú US$1.250 millones.

Entre los sectores que dominaron las ventas por este medio se encuentra claramente el turismo. Allí se registraron las facturaciones más grandes gracias a las agencias de viaje, el transporte aéreo, terrestre, hoteles y alojamientos. En cuanto al volumen de operaciones, damos un giro hacia bienes de consumo más inmediato como discos, libros, periódicos y papelería.

Con las cartas sobre la mesa, AETecno consultó con Luis Zanón, Director Internacional Tecnocom, quien desde nos adelantó que el e-commerce ha logrado este gran crecimiento en nuestra región, principalmente gracias a la expansión de internet, el uso de smartphones y las aplicaciones móviles que permiten transacciones y compras online.

-¿Qué factores serán clave para impulsar el desarrollo y la madurez del e-commerce en nuestra región?

Es vital mejorar el acceso a las tecnologías y el alcance que tiene el 4G en la región. En paralelo, es necesario aumentar la penetración de los medios de pago. Hoy el país que más tiene acceso es Brasil, pero con tasas aún muy bajas. Países como Chile, con una economía más desarrollada, tiene un acceso de menos de 30%. Recientemente, en este país, Multicaja obtuvo la licencia de adquiriente, sumándose a Transbank, lo que potenciará la penetración del uso de tarjetas de personas que tienen dificultades para acceder al sistema financiero tradicional, aumentará la competencia y permitirá a los pequeños comercios sumar mayores servicios en sus POS y en sus canales de venta electrónicos. 

Según nuestro estudio, en Chile destaca la apertura de las tarjetas de crédito del retail mediante alianzas con tarjetas de crédito internacionales, siendo pionera Falabella hace cinco años. En Perú, de la mano de Movistar y MasterCard, ya se encuentra disponible el primer servicio de dinero electrónico (“Tu Dinero Móvil”), que permite afiliar un número de celular de Movistar a una tarjeta prepago MasterCard para realizar diversas transacciones de pago, recarga y envíos de dinero. Mientras, el esperado proyecto de “Modelo Perú” auspiciado por la Asociación de Bancos del Perú (ASBANC), sigue en fase de pruebas. Este país, que vive un gran momento, en donde la inversión directa extranjera ha crecido bastante en comparación a otros mercado más maduros de la región.

-¿Cuáles, por el contrario, están siendo las principales barreras para que más personas adopten esta práctica?

-Una de las principales barreras es el fraude bancario cibernético, ya que según hemos constatado, presentan porcentajes de crecimiento superiores a la media global. Aunque no existe gran información en cifras, de acuerdo al Instituto Latinoamericano de Comercio Electrónico (eInstituto), el promedio de contracargos en Latam es más del doble que el detectado en EE.UU. y Canadá, y el índice de rechazo de órdenes de compra es tres veces superior al de los comercios de estos países. A pesar de ello, el caso de Chile, por ejemplo, muestra una tendencia al alza en el e-commerce cuadruplicando sus ventas. Esto se debe a que la industria bancaria ha invertido en sistemas de seguridad que le dan confianza a los usuarios para comprar por Internet.

-Considerando que las cifras del reporte son de 2014, ¿qué tendencias ha visto desde entonces hasta ahora, mitad del 2016?

-La principal conclusión, a ambos lados del Atlántico, es que el comercio electrónico es uno de los grandes vectores de crecimiento para los medios de pago online.
Otra de las tendencias es la billetera móvil. Cada vez más entidades emisoras están sacando wallets propios que permiten realizar pagos móviles en cualquier terminal de venta con capacidad Near Field Communication (NFC). En nuestro último estudio sobre Medios de Pago identificamos tres grandes líneas de innovación: las transferencias electrónicas inmediatas (Faster Payments), el creciente desarrollo de los Wallets móviles y los avances en comercio electrónico.

-¿Qué riesgos puede representar para una economía o país no avanzar en e-commerce? ¿Cuál es la importancia de masificar esta modalidad?

-Primero debemos fijarnos en los sectores económicos en donde se ha visto impulsado el e-commerce. Con esto nos referimos a sector turístico de venta de pasajes online y  compras de retail, que vienen al alza tanto en economías emergentes, como es el caso de Latam con países con gran dinamismo en México, Brasil, Chile y ahora Argentina, donde de seguro veremos mayor crecimiento en e-commerce. El no tener acceso a estas nuevas plataformas tecnológicas vendría a afectar a toda una generación líder en el mundo, que ya tiene más que interiorizado el uso de Internet, con redes sociales, compras online, etc. Por eso la tecnologización del comercio es tan importante, aparte de que el dinero se encuentra mucho más seguro de esta manera que de forma tradicional. Si un país no quisiese o no pudiese por limitaciones de infraestructura sumarse a este sistema, veríamos una desaceleración en su economía y serias dificultades para que el desarrollo de sus pymes.

-Finalmente, ¿qué está sucediendo con el comercio electrónico móvil? Estamos usando nuestros smartphones para comprar?

-Hace años que la industria ha mostrado un enorme interés por los ‘Wallets’ y los pagos a través del celular, éste ha aumentado gracias al uso ya generalizado de los Smartphones, sin embargo, sólo se había materializado en la realización de pilotos de ámbito reducido, derivado de las importantes limitaciones logísticas y del ecosistema comercial basado en las tarjetas SIMS. Esta situación, sin embargo ha variado radicalmente desde el año pasado y ha empezado a despegar con la entrada de los grandes players. Donde Visa, MasterCard y American Express ya han definido las bases técnicas para ofrecer pagos móviles de forma segura dentro de las redes actuales de pagos, como el Host Card Emulation (HCE). Además, cada vez más entidades emisoras están sacando Wallets propios que permiten realizar pagos móviles en cualquier terminal de venta con capacidad NFC.

A estas dinámicas del mercado se suma la fuerte apuesta realizada por fabricantes como ApplePay y SamsungPay, que se produce de forma paulatina y país a país, pero que tiene una gran capacidad para movilizar a millones de consumidores apasionados por la experiencia como usuario que estos fabricantes ofrecen. Los chilenos aún se encuentran reticentes en su mayoría al pago desde el celular, pero esto va a ir cambiando a medida que la tecnologización de los medios de pago vaya escalando en materia de seguridad, facilidad de uso y portabilidad.