Conversamos con John Chambers, quien habló sobre los planes de la compañía para Latinoamérica, además del futuro de internet y la siguiente generación de la interconectividad: la Internet-de-Todo.

Cisco es sin lugar a dudas una de las empresas más relevantes en la historia de la tecnología en los más amplios sentidos de la palabra. Presente desde los primeros años de internet y la interconectividad, la compañía ha sabido dirigir la innovación en el mercado y adaptarse de forma importante a los fuertes cambios que se suceden entre época y época. 

Frente a esto, cabe preguntarse cuáles son los planes de la compañía que llegó a ser la más valiosa del mundo en los años de la burbuja punto com, en esta nueva economía más móvil, social e interconectada. 

Con esa intención participamos hace algunas semanas en el Editor's Day, de Cisco, donde pudimos ver algunas de las tendencias que estarán marcando la pauta de aquí a 20 años, y aprovechamos, junto a varios periodistas latinoamericanos, de reunirnos con John Chambers, el CEO más exitoso que ha tenido la compañía, y quien lograría llevarla de unos US$1.200 millones anuales en ganancias en 1995, hasta los más de US$46.000 millones del año pasado.

Aquí presentamos un extracto de lo que conversamos con John Chambers, respecto a los planes para Latinoamérica, el futuro de las comunicaciones e internet, y la visión de la compañía respecto a la época que cruzamos en tecnología.

-¿Podrías darnos un panorama de lo que será Latinoamérica para Cisco, en el corto y mediano plazo?

-Latinoamérica ha sido tradicionalmente una muy buena fuente de ingresos para Cisco, y en el mediano plazo va a sobrepasar a otras regiones geográficas si nos movemos bien. En el largo plazo nos van a ver incrementar nuestro compromiso con la región, y esto en todas las categorías en que trabajamos.

En términos de oportunidades, vemos en general (aún cuando algunos países están mejor que otros), una evolución positiva a nivel de crecimiento de la clase media, la habilidad de mejorar la salud y la educación, la importancia de creación de empleos e innovación, y el rol que la banda ancha y las telecomunicaciones juegan en esto. Además, el objetivo de Cisco es volverse el principal jugador en este sector y eso ayudará también al crecimiento mismo de la industria y de la región en sus objetivos.

Cuando vemos la oportunidad de crecimiento en la región también vemos la oportunidad de asociarnos a las principales empresas en todos los países de Latinoamérica de una forma que sólo Cisco puede lograr. Y esto es así en todas partes, cuando hablas alrededor del mundo sobre, digamos, el liderazgo en Rusia, te vas a dar cuenta que dirán que Cisco es el mejor partner de TI para el país, porque ayudamos a transformarlo a nivel de telecomunicaciónes, los ayudamos a crear empleos, los ayudamos en la educación, construimos centros de innovación, etcétera.

Y esto también puede verse por ejemplo en México, donde tenemos muy buenas asociaciones; o también en Brasil, donde lo hemos hecho muy bien pero yo quiero mejorar aún más nuestra aproximación. Si vas a India, a China, a donde vayas, somos muy buenos en formar relaciones que sean importantes para el futuro del país. Nosotros invertimos a largo plazo, hemos tenido 172 mil estudiantes en academias de redes a lo largo de Latinoamérica, por ejemplo... pero lo que es emocionante es que sólo este año hemos hecho la mitad de lo que hicimos en la última década en la región, entonces puedes ver un incremento en nuestro compromiso con Latinoamérica.

-¿Cuál es el estado de la inversión de Cisco en Latinoamérica y qué podemos esperar para el futuro?

-Nos van a ver comprometernos en muchos niveles. Lo primero es que tenemos un top 5 de mercados en crecimiento, y es ahí donde concentramos más nuestros esfuerzos. Esos países son India, China, Rusia, Brasil y México. Después de eso tenemos otro grupo, la siguiente generación si se quiere, y ahí también se incluyen países de Latinoamérica. Esto implica que nos esforzaremos en aumentar nuestro compromiso a nivel de inversión, de creación de empleo, de centros de innovación, healthcare, educación, y también nos verán ayudar en los Juegos Olímpicos. Este es un tema muy impresionante y complejo: somos la compañía que más ha aportado en el manejo de las comunicaciones en la historia de los eventos olímpicos. ¡Es convertir una ciudad en un país a nivel de comunicaciones!, y es algo que impacta al país en su totalidad y para el futuro, no es un trabajo sólo para un evento específico.

Para darte otro ejemplo de compromiso y crecimiento, hacemos muchas de las estadisticas para el Mobile World Congress en Barcelona, y la información es muy específica: cuando doblas la penetración de banda ancha, aumentas el PIB del país en 0,5%. Pongamos esto en perspectiva, si aumentamos la penetración de banda ancha en Latinoamérica, desde el 10% actual hasta un 20%, aumentaría también la productividad de todos los países de la región en 0,5%. Entonces ahí ves la importancia y el impacto de las políticas de banda ancha en estos países. En Estados Unidos si no creces a un ritmo de 2,5% simplemente no hay creación de empleo, es un estatus quo: el aumento del PIB es totalmente necesario para la generación de empleo.

Entonces muchos no enfocan bien el problema y hablan sólo en torno a la inversión. Lo que nosotros queremos es mejorar aspectos de los países que impacten directamente en la calidad de vida de las personas, y en función de eso tenemos que convertirnos en la compañía de TI más importante de cada país, y para eso tienes que ayudar a las empresas, al gobierno y a los propios usuarios a conseguir sus objetivos de conectividad y tecnología. Ese es el compromiso de Cisco.

Entonces a donde estamos yendo es cómo llegamos a lo que llamamos "la cuarta generación de la internet", la primera siendo primariamente conectividad: e-mail, la habilidad de compartir información, etcétera; la segunda va más enfocada al e-commerce, distintos modelos de negocio y las formas de comercio en la red; la tercera es donde estamos ahora, más social, redes, conectividad móvil y en todos lados, etcéra; y el siguiente es uno de los temas más importantes para nosotros, y es el "Internet-de-todo" (IoE, por sus siglas en inglés). Esto consiste en digitalizar el mundo, todas las cosas del planeta estarán conectadas mediante una interfaz a una infraestructura, eso incluye caminos, aparatos de salud, sensores de todo tipo recopilando grandes cantidades de información... hace 10 años, por ejemplo, había 200 millones de conexiones a internet, ahora hay 10.000 millones, en 10 años van a haber 50.000 millones, y 10 años más adelante de eso mi proyección es que habrá 500.000 millones. El poder de la red sobre la salud de la economía y la generación de trabajos crece exponencialmente.

Esto es un mercado de US$40 billones de mejoras en ganancias, si se hace bien significa un crecimiento extra de más del 2% para todas las compañías en la región. Piensa en las oportunidades de trabajo con este crecimiento, y ¡esas son ganancias después de que haces la inversión! Así que considero que esta nueva evolución de internet va a ser más grande que todo lo que hemos tenido hasta ahora reunido. Puedes escuchar a la gente hablar de Big Data, puedes escucharlos hablar de de Cloud y virtualización, y si mezclamos esas tecnologías con las cosas de las que he hablado, Entonces miramos a esto como una estrategia del sistema completo, donde incluyes información, procesos, personas y cosas. Y esto significará US$40 billones en términos de beneficios económicos para el mundo, y estos 40 billones además estarán bastante balanceado en industrias y regiones diversas.

[youtube:http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=wRiPRoRzJL4]

 -Los países de la región presentan variados problemas y situaciones económicas, ¿podría darnos una visión general de los más relevantes?

-En México fue mi desición que nos comprometieramos en profundidad. Uno por lo general se compromete más cuando hay un periodo de crisis o un incidente grave, entonces cuando surgió el problema de la gripe aviar, H1N1, nos dedicamos a realizar compromisos con México el mismo día en que se detectó. Nuestro equipo de liderazgos se dio cuenta del tremendo estrés al que el país quedó sometido, pero también vimos que si el Gobierno no podía comunicarse eficientemente, habrían muchos más problemas: la información de los hospitales, poder ver lo que estaba pasando en tiempo real, etcétera. Entonces en ese momento nos movimos desde tener una buena relación con el gobierno a decir "estamos completamente comprometidos". No nos subimos a un avión y escapamos, nos preguntamos, "¿cómo podemos ayudar aquí?", Y juntos desarrollamos uno de los más completos sistemas de comunicación en el mundo. Y esto no sólo con la intención de solucionar la crisis específica, sino que también pensamos que una vez que el gobierno se diera cuenta del impacto y las posibilidades de la tecnología, cambiaría su visión de cómo tenía que tratarse la salud, los servicios sociales, la justicia, etcétera. Entonces tenemos una muy buena relación con México, tenemos centros de innovación allá y una muy buena relación con las Telcos, y nos verán incrementar esa relación, ya sea con los líderes de los principales negocios como con el gobierno por por lo menos los próximos 5 años.

Chile: En temas de alta tecnología he estado involucrado en Latinoamérica por 27 años. Con laboratorios de vino estuve en todos los mercados emergentes: América Latina y Asia Pacífico entre ellos, así que he conocido los países y las regiones por un tiempo largo. Pero Chile y Argentina han tenido una historia larga de efectividad y despligues tecnológicos en telecomunicaciones. En Chile ocurre algo bastante parecido a Canada, Australia o los países escandinavos: es un país muy grande, con una población bien repartida territorialmente y bastante bien educada, entonces frecuentemente los ves liderar en telecomunicaciones, con una voluntad para hacer una diferencia y decir "¿cómo utilizo esto en nuevos modelos de negocios'". En términos de aproximación en Chile, como probablemente lo saben, estamos catalogados número 1 en la lista de Best Place to Work, entonces tenemos una muy buena relación.

Con respecto a Argentina, es un país que tiene bastantes fortalezas económicas, y tradicionalmente nos ha ido muy bien ahí. Aunque los últimos años han sido bastante difíciles por culpa de las barreras aduaneras al equipamiento de telecomunicaciones, y si bien entendemos las razones por las que los gobiernos implementan estas barreras, creemos que esta es quizás una que tiene que repensarse, porque aquí no se trata de la forma en la que afecta a las compañías de telecomunicaciones o de equipamiento relacionado, si no cómo afecta al despliegue de la red que van a estar utilizando las empresas y las personas en tu país, algo que influye directamente en la calidad de vida, y como ya mencionamos antes el mejoramiento de la infraestructura de banda ancha puede lograr un aumento permanente importante en el PIB de un país. Así que si quieren mantener sus políticas aduaneras, quizás deberían hacer una excepción con los equipamentos de telecomunicaciones, porque afecta a los ciudadanos y pone al país en una posición menos competitiva.

Brasil, como deben saberlo, es practicamente la mitad del poder económico de Latinoamérica, y por lo mismo hemos estado muy comprometidos con ellos. El negocio de Cisco ha ido bien ahí, pero creemos que hay que redoblar los esfuerzos que estamos haciendo. Por una parte tenemos que encargarnos de hacer de la experiencia de los juegos olímpicos algo exitoso, pero no es sólo eso, sino de cómo los cambios que aseguremos para que los JJ.OO. funcionen van a afectar y beneficiar a los ciudadanos y las empresas una vez que el evento ya haya pasado. También contamos con academias y centros de innovación en Brasil, entonces, en general es un mercado con el que estamos muy comprometidos y en el que seguiremos poniendo esfuerzos.

-Tengo una pregunta sobre IoE. ¿Cuál es su visión de las posibilidades de Latinoamérica en esta tendencia?, ¿cuál va a ser el modelo de negocios para ustedes como Cisco?

-Lo emocionante de la IoE en nuestra investigación, es que no sucede como pasa generalmente, que los países más desarrollados son los primeros en implementar las tecnologías y obtener los beneficios. Según lo que vimos, acá existe un balance altísimo en las posibilidades del IoE entre una región y otra, y una diferencia en torno a las posibilidades de las industrias específicas en la región. Por ejemplo, a nivel de capitalización, el sector de manufactura podría tener un 25% más de oportunidades los primeros años, telecomunicaciones se llevaría el 11% del total, también crecería la salud, los servicios financieros en torno al 10%, etcétera. Lo que intento decir es que el crecimiento se dará en los países más pequeños con una distribución más o menos similar por industria, de la misma forma que podremos ver en practicamente todo el mundo. Y por eso es importante que las telecomunicaciones y el acceso a internet banda ancha mejore en todas las regiones, porque será la fuente principal de servicios para los ciudadanos. Es como una autopista, sólo cuando está ahí puedes encontrar a un médico que te diagnostique a distancia, sólo cuando esté ahí puedes mejorar la eduación social, o poner a personas a trabajar desde la casa para estar cerca de sus hijos. Entonces, la banda ancha es la llave económica para la siguiente generación de crecimiento por internet, que vendrá con todas estas nuevas capacidades de operación y trabajo, y estas capacidades serán también en muchos casos inalámbricas.

A esto nos aproximamos con una arquitectura abierta, -a diferencia de nuestra competencia-, así que confiamos en nuestra habilidad de liderar el mercado en este sector, por lo que de hecho tuvimos hace poco las primeras discusiones en torno al foro mundial de Internet of Things (que debería expandirse a IoE), donde participaron 65 empresas, expertos de la industria, y donde se definieron las primeras líneas para el Internet of Things World Forum, que se llevará a cabo en Octubre en Barcelona, y donde seremos quienes estarán dirigiendo la discusión. Y no se trata tampoco de que nosotros hayamos dicho "vamos a dirigir esto", si no que el resto de los participantes nos impulsaron a realizarlo, en función de la experiencia y capacidades que Cisco tiene en el área de las conexiones y la tecnología TI.

-¿Cómo ve a Latinoamérica en el contexto de la innovación y el emprendimiento?

-Muy bien en algunas industrias, pero no tan bien en otras. Desde una perspectiva de tecnología avanzada, no tan bien como me gustaría ver. Si te fijas en dónde crecemos más, es en los lugares donde adquirimos compañías. Si te fijas en donde están nuestros centros de innovación, siempre surgen startups de high-tech importantes, que luego adquirimos y desarrollamos en la región. En suma, diría que se encuentran buenos emprendimientos tecnológicos pero no tan buenos cuando hablamos de high-tech, y esa es la razón por la que tienen que ser cuidadosos con sus regulaciones, en el sentido de que en algunas ocasiones, sin siquiera intentarlo, pueden atentar contra la innovación y la industria high-tech.

Lo que pasa es que la velocidad de esta industria es tal, que si te retrasas un poco en una transición del mercado, ya se vuelve muy difícil recuperar la distancia en esa línea de servicios/productos. De las 18 familias de productos en las que estamos, somos número uno en 12, número dos en 3 y sólo en 1 número cuatro. Entonces reunimos estos productos dentro de una arquitectura y de una forma en que nadie más puede, y así es como cambiamos y mejoramos la educación, la salud, la conectividad, etcétera.

-Han estado haciendo adquisiciones de una forma bastante agresiva los últimos años, moviéndose hacia nuevos mercados, y me parece que Cisco está intentando cambiar la forma en la que es visto por los clientes. ¿Cómo definiría el estado actual en el que se encuentra su compañía y qué podemos esperar para el futuro?

-La forma en la que defino el estado actual es la "cuarta fase", del proceso de "digitalización de todo", en el marco del IoE. Eso implica que vamos a estar adquiriendo compañías en el ámbito de la nube, data centers, tecnologías móviles, sociales, seguridad, etcétera... y esta es una tendencia de crecimiento en la que nos encontramos hace un tiempo, adquiriendo unas (no hay nada mágico respecto al número) 12 compañías al año, de las que aproximadamente la mitad tienen un valor sobre los US$100 millones. Durante la época de desaceleración de la economía (algo que vimos venir y advertimos diciendo "hay algo malo con las instituciones financieras del país"), fuimos más cuidadosos y no adquirimos ninguna compañía de aquel valor. Ahora, que las cosas están tomando velocidad nuevamente, hemos adquirido varias sobre ese valor e incluso un par que alcanza los US$1.000 millones. Por eso has visto un alza en la actividad de la compañía, porque hemos vuelto a nuestra fase usual.

-Los países latinoaméricanos tienden a verse enfrentados a muchos menos recursos que los que poseen otras regiones. ¿Cree que Latinoamérica podrá alcanzar el nivel de desarrollo, en términos de TI, que necesita para crecer?

-Sí lo creo, y si lo piensas la región es muy buena en algunos aspectos de telecomunicaciones y conectividad entre países, y yo no subestimaría el valor de eso. Nosotros estamos invirtiendo asumiendo que será una de las regiones que más rápido crezca en el mundo, y con con esto tenemos la intención de duplicar nuestra presencia.