Los rumores se hicieron realidad. Aunque Canon se ha mostrado algo reticente a la creación de cámaras sin espejo, recientemente anunció la Canon EOS M, un producto elaborado para expertos y aficionados. Su mayor atractivo, como adelantamos, es que es su primera cámara de objetivo intercambiable que no trae espejo réflex.

Cuenta con un sensor CMOS de tamaño APS-C y una resolución de 18 megapixeles, según informan fuentes de la compañía, el mismo de la EOS 650D. Trae una montura compatible con las ópticas EF y EF-S e incluye dos objetivos con bayoneta EF-M compatibles con la nueva montura de la cámara: el zoom 18-55 mm f3.5-5.6 IS y del pequeño 22 mm f2.

La Canon EOS M es compacta y cuenta con una pantalla táctil de 3 pulgadas con tecnología capacitiva. La pantalla ha permitido reducir en un 35% el número de mandos y botones. Incluye un sistema de ráfagas de hasta 4,3 fotos por segundo, el nuevo sistema de autoenfoque híbrido de la 650D, un modo de trabajo manual y la posibilidad de disparar en RAW.

Además, incluye la posibilidad de grabar en video Full HD, capaz de grabar en secuencias de 1920 x 1080 puntos a 30, 25 o 24 fotogramas por segundo, con un conector para micrófonos externos y uno estéreo integrado.

El modelo estará disponible a fines de septiembre, y su precio será de alrededor de USD$1000.