Aunque no se han presentado pruebas públicamente y la tecnológica china ha negado las acusaciones, varios países occidentales han restringido el acceso de la empresa a sus mercados.

A pesar de las acusaciones de Estados Unidos de que la firma china y sus productos podrían ser utilizados por Pekín para espiar, los funcionarios de seguridad británicos desestimaron apoyar la prohibición total de que Huawei opere en las redes nacionales de telecomunicaciones.

Huawei, el mayor productor de equipos de telecomunicaciones del mundo, está bajo la vigilante mirada por parte de Occidente, por su relación con el gobierno chino y las acusaciones de permitir el espionaje estatal. Estas incriminaciones han llevado a Estados Unidos a pedir a sus aliados que no utilicen su tecnología.

Aunque no se han presentado pruebas públicamente y Huawei ha negado las acusaciones, varios países occidentales han restringido el acceso de la empresa a sus mercados.

“No estamos a favor de una prohibición completa. No es tan simple”, dijo una de las fuentes a Reuters esta semana, después de que un artículo del Financial Times publicara que Reino Unido había decidido que podía mitigar los riesgos sobre la utilización de equipos de Huawei en redes 5G.

El medio recogía comentarios de dos fuentes familiarizadas con un informe del Consejo Nacional de Seguridad Cibernética (NCSC) de Reino Unido, que el año pasado mencionó que los problemas técnicos y de la cadena de suministro con los equipos de Huawei habían expuesto a las redes nacionales de telecomunicaciones a nuevos riesgos de seguridad. 

Por su parte, Huawei no quiso hacer ningún comentario por el momento.

Una eventual decisión de permitir que la firma china participe en la construcción de redes 5G de próxima generación será vigilada de cerca por otras naciones, debido a la pertenencia británica al grupo de intercambio de inteligencia Five Eyes, que también integra Estados Unidos.

Reino Unido es un mercado importante para Huawei y, el mes pasado Vodafone, el segundo operador de telefonía móvil más grande del mundo, dijo que estaba “frenando” el despliegue de sus equipos en las redes centrales hasta que los gobiernos occidentales otorguen a la firma china la autorización total de seguridad.

La ofensiva de Huawei

Esta semana el CEO de la firma china, Ren Zhengfei, en conversación con medios británicos, cargó contra la iniciativa estadounidense de marginar a la empresa de telecomunicaciones y aseguró que el mundo no puede vivir sin ella y su tecnología “más avanzada”.

Ren Zhengfei, foto por Huawei.

En entrevista con la BBC, Zhengfei dijo: “No hay manera de que Estados Unidos nos aplaste, el mundo no puede prescindir de nosotros porque somos más avanzados”, mencionó.

Esta ofensiva se da no solo en el contexto anterior, sino también a raíz de la detención “políticamente motivada” de su hija y directora financiera de la empresa, Meng Wanzhou, acusada de violar las sanciones estadounidenses a Irán. “Nos oponemos a ello. Pero ahora que ha tomado este camino, dejaremos que los tribunales lo resuelvan”, añadió.

Finalmente, el ejecutivo de 74 años arremetió: “Si las luces se apagan en Occidente, Oriente seguirá brillando [...] Estados Unidos no representa al mundo”.

Dos fuentes dijeron que el NCSC no creía que fuera necesario excluir por completo a Huawei de las redes británicas, al considerar que podrían continuar gestionando los riesgos probando los productos en un laboratorio especial supervisado por responsables de inteligencia.