J.M. Piquer: “las TICs están transformando el negocio de todas las industrias”

Por en Social Media

La tecnología está redefiniendo el negocio de cada vez más compañías. Empresas tan diferentes como Nike o Mercedez-Benz, están en una transición tan potente que algunos ya las denominan empresas de tecnología. El doctor en informática chileno José Miguel Piquer nos pone al tanto sobre estos fenómenos y otros que están re configurando la sociedad.

Inscríbase en nuestros newsletters

El investigador chileno José Miguel Piquer, Ph.D. en Informática de la École Polytechnique de París, director de NIC Chile e investigador de la Universidad de Chile, es una de las voces más reconocidas del país en todo lo que tiene que ver con ciencias de la computación.

Conversar con Piquer es adentrarse en la vanguardia tecnológica mundial. No es necesario ir Silicon Valley o Tokio para conocer las tendencias y problemáticas principales, en Santiago, la capital chilena, también se puede reflexionar en torno a las posibilidades de la Inteligencia Artificial, las relaciones hombre-dispositivo, la ‘moral’ de las máquinas o la 'singularidad', concepto que algunos piensan está pronto a revolucionar al mundo entero. Todas estas nuevas tendencias de la industria, son abordadas con naturalidad por Piquer.

AETecno conversó con José Miguel Piquer en el marco del 5° Foro de Level 3 ‘La Internet de las Cosas’, donde Piquer fue uno de los exponentes.

 

1-. Algunos investigadores están hablando de las complejas interacciones que estamos teniendo con nuestros dispositivos, cada vez más numerosos ¿Cómo ve las futuras relaciones que tendremos con nuestros dispositivos?

Yo no creo demasiado en la Inteligencia Artificial (AI, por sus siglas en inglés) en sí. Tengo la impresión que todavía estamos muy lejos de aquello, y además por decenios hemos venido tratando de hacer algo razonablemente bueno y nos ha quedado muy bien. Hacer un software que parezca humano no nos ha resultado, uno detecta muy rápido que no son personas. Hay que ser un ingeniero bastante tecnológico y nerd para enamorarse de Siri (por ejemplo). En el fondo, tú te das cuenta que eso es un dispositivo y que no reacciona como lo hace un ser humano. Y tengo la sensación que estamos lejos de lograr un robot como el que soñábamos en las películas de ciencia ficción, como HAL 9000, de 2001: A Space Odyssey.

(Crédito imagen: typewritingblog)



Por lo tanto, no creo que ocurra, tal vez en 20 o 30 años más. En realidad, en los últimos 20 años hemos trabajado en eso, hemos pensado que sabemos cómo hacerlo, pero no lo hemos logrado. No es un tema de capacidad de procesamiento o de cálculo, porque eso lo hemos multiplicado por millones, el tema es que no sabemos cómo pensamos y cómo simular una inteligencia.

A cambio, los dispositivos, manteniéndose en un formato tonto, simple y esclavos, sí los tratamos de otra forma. Nuestro dispositivo móvil ya no es un botón, no lo miramos como un mueble, más que ser un ser inteligente con el cual tú estableces una relación, empieza a formar parte de ti. Comparto más esa visión, de que los dispositivos se integran contigo, empiezan a formar parte de tu cuerpo -como tener una prótesis-, es algo tan indispensable que comienza a ser parte tuya.

2-. Recuerdo las 4 reglas de los dispositivos móviles del futuro de Intel, donde una de las principales características es que estos no distraigan a las personas de la vida cotidiana. ¿Qué piensa al respecto?

Exacto. Y no es el caso de hoy en día, hoy nuestros dispositivos nos distraen todo el tiempo. Piensa en el porcentaje de tu vida cotidiana que le dedicas a tus dispositivos, a tu auto, tu smartphone o tu PC, en cosas que son para que ellos funcionen, no en para resolver un problema tuyo. Estas perdiendo esfuerzo, tiempo y dinero en atenderlos a ellos. Por ejemplo, en una ciudad, la cantidad de tiempo que tu vives en los congestionamientos de tráfico: el atochamiento no es un problema que tú tengas que resolver dentro de tu vida profesional, es una estupidez, es un efecto lateral de todos estos dispositivos.

Entonces, hemos creado una vida que no es agradable, en la cual no somos felices debido a todas esa cosas (dispositivos) que nosotros mismos inventamos para hacernos la vida más fácil.

Efectivamente, lo que tu señalas, de que los dispositivos no nos distraigan, que no necesitemos pasar la aspiradora y que tampoco esté la aspiradora metiendo ruido cuando queremos conversar. Ese dispositivo que hace su trabajo, pero que no nos molesta, es nuestro sueño: se coordina con los otros, se va a enchufar cuando necesita energía. O el tarro de basura que emite una alarma cuando está lleno para que alguien lo vaya a vaciar...¡no!, ¡váciate solo! El tema es que tú no necesitas un ser humano para hacer eso.

3-. ¿Llegarán a tener moral las máquinas?

Yo creo que el auto que se maneja solo no va a ocurrir. Creo más en las autopistas inteligentes, donde tu llegas manejando con tu auto y te metes a la carretera X y le dices ‘ahora manéjame tú’, donde es la calle la que controla. Es muy compleja la conducción de un vehículo, la cantidad de cosas simultáneas que tienes que estar vigilando y la cantidad de decisiones difíciles que debes estar tomando. Decisiones sobre, por ejemplo, de a quién atropellas, o si frenas, o si es un gato, ¿pasas por arriba o esquivas arriesgándote a morir?



Además, nuestro cerebro es muy bueno para tomar decisiones difíciles en tiempo real, estamos muy orientados a eso, y que un computador haga todo eso, en un entorno no controlado es muy difícil. Hacer una demostración muy bonita en una calle es una cosa, pero yo no le confiaría mi vida a algo así por muchos años todavía.

Pero a cambio, una autopista, donde hay carriles, donde está todo controlado, donde todos los autos están siendo manejados por la autopista, donde no hay humanos manejando, y no se puede entrar a la autopista si tu auto no respeta esa norma, en esto sí creo. Es mucho más fácil, todo está controlado y optimizado, es muy distinto. Pero eso funciona solo en caminos troncales, una vez que tu sales de ellos vuelves a tomar el control del auto. Controlar las arterias centrales, en eso sí creo. Es distinto el modelo.

4-. Investigadores y cerebros de renombre hablan de una ‘singularidad’ que llegaría en un futuro,  ¿de qué se trata todo esto?

Me costó creer que hubiera gente que creyera en serio en eso porque suena muy loco.

Es gente muy inteligente de todo el mundo que forma una universidad (Singularity University) y están entrenando a personas para prepararse para la ‘singularidad’, que no tiene nada de malo, ya que no la están preparando para el fin del mundo, sino que están haciendo a la gente más inteligente y más innovadora en ese sentido.

La idea de ellos es que estamos llegando a una capacidad de procesamiento, de computación en la nube y de software, que va a resultar en que, como humanidad, vamos a tener un potencial de pensar, reflexionar y planificar que nunca antes la humanidad había tenido. Lo que es más o menos cierto.

En el fondo es como decir que nuestro cerebro ya está limitado, pero sabemos cómo ser más inteligentes de lo que somos: estos computadores nos harán más inteligentes, va a ser una sociedad con mayor inteligencia...la civilización entera es más brillante que un individuo, lo cual es más o menos lo que pasa hoy en día.

Este grupo plantea que la singularidad cambiará dramáticamente nuestra historia, la singularidad donde se llega a un punto donde de aquí para adelante todo es distinto, hay un antes y un después. Y tiene que ver con esta integración de las máquinas, con esta conversación entre ellas, de mayor capacidad de procesamiento y software más inteligente, y de un poco de AI también. Más que una máquina inteligente ellos plantean una civilización inteligente, como estas inteligencias tipo panal.

Si eso va a ocurrir, somos incapaces de predecirlo. En general esas cosas, cuando ocurren, nunca las hemos visto venir. Pero es interesante que la tecnología está empezando a ser tan importante y disruptiva en nuestras vidas que se puede llegar a pensar en eso, y en realidad nuestra vida ha cambiado mucho. ¿Cómo era la vida antes de internet?. Como uno leía o buscaba información antes es realmente impresionante. Aunque a veces no nos damos mucha cuenta, pensamos que somos la misma persona, pero en realidad nuestra capacidad actual para resolver un problema es increíblemente rápida y eficiente.

5-. Algo pasa con las compañías: están mutando. Nike, por ejemplo, está siendo considerada no más como un fabricante de ropa deportiva, sino como una compañía de tecnología, ¿cómo ve usted estos cambios de rumbo?

Hay una gran oportunidad y una gran crisis a la vez para todas estas industrias, es muy difícil esa mutación y va a ocurrir en muchos lados. También escuché a un ejecutivo de Mercedez-Benz que definía que su empresa de aquí en adelante era una empresa de información y comunicación, y que ya no se consideraban fabricante de autos.

Además, hay un gran número de revoluciones que están pasando, como las universidades por ejemplo, en qué se transforman si existen todos estos cursos online gigantescos (MOOC) y qué empezamos a aportar; ¿qué es un banco ahora?, ya no necesita sucursales, ya no necesita dinero, tarjetas. La verdad es que estamos redefiniendo en base a la tecnología y a una sociedad que cambia, prácticamente todas las industrias. Hay muy pocos sectores que no se están viendo afectados.

En realidad pienso que va a venir una reestructuración grande de las industrias en general, que estamos recién viéndolo. Tampoco tiene mucho sentido que todas las empresas del planeta tengan que transformarse en una compañía de software, lo lógico es que hayan especialistas en software que resulevan los problemas.

Pero se nos ha complicado el naipe, porque las TICs se han vuelto tan relevantes en todas las industrias, que se empiezan a transformar en el ‘core business’ de todo el mundo, con lo cual estamos volviendo un poco al modelo antiguo y dejando un poco de lado el modelo donde no tenía sentido tener mis propios equipos (outsourcing), ahora estamos de vuelta. Es una industria donde todavía quedan muchos años para estabilizarse.

Comentarios