Las ciudades conectadas serán el motor del desarrollo global en el futuro. Y el aporte de las startups a este crecimiento es fundamental. Conozca cómo estas 5 ciudades, incluida Santiago de Chile, están integrando el mundo de las tecnologías, los negocios y el emprendimiento.
Hoy, ya no son necesariamente las empresas más grandes las que se comen a las pequeñas, sino que las más rápidas, se comen a las más lentas. Esta popular consigna del último tiempo ha encontrado gran cabida respaldada por la creciente oleada de herramientas tecnológicas que permiten a las compañías mejorar sus procesos de producción. La revolución digital llega a tal punto que las mismas ciudades deberán ser capaces de transformarse si quieren seguir sobreviviendo en el mundo competitivo que presenta este sistema.
Es por tal motivo que las incubadoras y aceleradoras -las populares startups- están ganando terreno en distintas ciudades del planeta, como referentes e importantes agentes del cambio digital y tecnológico. De igual forma, las administraciones políticas y administrativas están fomentando el desarrollo de un ecosistema tecnológico que fomente e integre la vida virtual.
De hecho, los reportes apuntan a que las ciudades conectadas serán el motor del desarrollo global en el futuro, si es que no lo son ya en el presente. Según el McKinsey Global Institute, las 600 ciudades más grandes y mejor conectadas capturarán casi 2/3 del crecimiento económico y abarcarán más de la mitad del PIB global.
Por eso, te presentamos 5 ciudades destacadas por Greg Lindsay (co autor de 'Aerotropolis: The Way We'll Live Next'), en Inc.com, uno de los analistas referentes sobre la industria del futuro. La buena noticia para América Latina es patente con la aparición de Santiago de Chile, un modelo que empieza a ser mirado con buenos ojos en la región y podría replicarse en otros países.
DUBAI, EMIRATOS ÁRABES UNIDOS
Respaldado por las millonarias inversiones de la nación, con cifras cercanas a los US$1.500 millones para financiar proyectos de startups, Dubai es sin dudas uno de los polos fuertes de desarrollo. Se trata de un proceso de expansión del mundo de internet en las compañías árabes, que están dispuestas a asociarse en nuevos conglomerados y abrirse camino en la región.
Así, pese a las dificultades que pudiera acarrear las condiciones climáticas, el alto precio de las viviendas, los aspectos culturales y el escaso talento tecnológico, los empresarios están dispuestos a sacar provecho de las inversiones en infraestructura, los bajos impuestos y la tolerancia a los extranjeros.
Por último, iniciativas que promueven competencias específicas sobre una industria aceleran el desarrollo. Con grandes premios monetarios han conquistado eventos sobre drones y las impresoras 3D, por ejemplo. Ahora solo queda esperar que puedan lanzar algo que les falta: una súper aplicación.
SANTIAGO, CHILE
La apuesta de Santiago por atraer e impulsar el mundo de las startups ha llamado la atención mundial y se ha transformado en un modelo interesante de imitar. La iniciativa es tal que Start-Up Chile paga a los emprendedores para que se muden ahí. Iniciando en 2010 les ofreció visas de trabajo por un año, espacios de trabajo abiertos, gratis, y US$40.000 en efectivo. El programa del gobierno fue un hit y atrajo a 16.000 postulantes. Finalmente, más de 1.000 startups de 75 países fueron aceptadas.
Esta iniciativa estaba concebida también para darle una lección a Santiago. Querían aprender cómo hacer start-up, cómo emprender, empaparse de la cultura de la innovación y los negocios tecnológicos. “Para cambiar la cultura, debes traer extranjeros”, señalaba Vivek Wadhwa, uno de los consejeros de Start-Up Chile. Esto se ha ido reforzando gracias al buen clima de negocios en general que tiene esta ciudad.
Hoy por hoy, se sigue produciendo un interesante mix entre las compañías de este programa que interactúan y aprender unas con otras, mientras el joven talento local se incorpora a estas empresas para trabajar y seguir formándose, contribuyendo al crecimiento y madurez de la ciudad.
TALLINN, ESTONIA
A diferencia de lo que ocurre con Chile, donde te dan facilidades para mudarte al país, Estonia ofrece un programa de residencia virtual o electrónica que pudiera resultar muy atractivo para un gran grupo de emprendedores. Esta iniciativa te permite acceder a los mismos beneficios, la identidad digital, de los estonios. Puedes acceder a cuentas bancarias, registrar negocios y facilitar el acceso a más de 4.000 servicios locales.
Una nueva nación de nativos digitales es la gran ambición de este programa. Con menos de 500 mil habitantes, Tallinn es la ciudad más pequeña de la lista, pero ofrece a los emprendedores uno de los pozos con talento técnico más preciados de todas las capitales europeas.
Otro de los plus de esta ciudad radica en el entorno económico en que se desenvuelve hoy en día, con cada vez más compañías estonias figurando en los rankings de crecimiento en Europa y un marco de colaboración público-privada que favorece a los emprendedores que “lleguen” al país.
ESTAMBUL, TURQUÍA
Turquía es la puerta de entrada a un mercado enorme con una población de 76 millones de habitantes más los turcos de Rusia y los esparcidos por ciertas regiones de Asia. Aquí los emprendedores que siguen el modelo de Estados Unidos son oro puro.
Diversos servicios y aplicaciones que se han lanzado desde aquí cuentan con probado éxito global, como el de un servicio de comida a domicilio (Yemek Sepeti) que junto a sus socios cuenta con 14.000 restaurantes y toma 150.000 órdenes diarias de 3,5 millones de usuarios.
El capital humano y el talento local de Estambul está mejorando y se puede considerar que aún es barato, de bajo costo. Sin embargo, el convertirse en un puerto de desarollo de compañías emprendedoras está significando también una serie de problemas con los cuales se debe lidiar. El enorme tráfico, alto costo de la vida y un exceso de competidores más pequeños pueden ser agentes que amenacen el sano entorno de negocios y emprendimiento. No obstante, la nula estabilidad política del país, con las debilidades presidenciales propias del último tiempo en Turquía, son la principal amenaza hoy por hoy.
SHENZHEN, CHINA
Shenzhen es el arqueotipo de una megaciudad. Hace unos años no era mucho más que una aldea de pescadores, pero hoy está rodeada de enormes rascacielos y centros comerciales que convergen con el clima subtropical y dan cuenta del crecimiento económico que ha tenido.
Esta ciudad china está atrayendo cada vez más startups que antes quizás se limitaban a subcontratar la fabricación aquí. Hoy, es un imán para las compañías de hardware que buscan aprender de la experiencia china al respecto. Haxlr8r, una aceleradoras ha sabido graduar a más de 50 compañías usando un modelo familiar: aprender lo básico de la manufactura y desarrollar un prototipo; recaudar fondos en los Estados Unidos a través de Kickstarter; construir el producto; y lanzarlo enviándolo a cualquier parte del mundo a través del sistema de logística del Peal River Delta's. COn el lanzamiento de productos de esta forma, las startups ganan una gran cantidad de tiempo in meterse a los mercados y evitar el costo de los errores que vienen en esta etapa, según menciona Cyril Ebersweiler, el fundador de Haxlr8r.
Aquí las asociaciones son esenciales y las posibilidades de salir al mundo están cercanas a la relación que establecen las empresas cuando participan en la cadena de fabricación y envío del producto. Para los emprendedores que no están dispuestos a trasladarse a Shenzhen pueden inscribirse en la incubadora de la compañía en San Francisco, en el que los empresarios construyen sus prototipos y conectar sus órdenes con China.
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