Una de las preocupaciones que nos ha traido internet con su masificación es qué sucede con nuestra información luego de que fallecemos. Nuestra identidad digital está alojada en muchos sitios, los cuales tienen distintas políticas con respecto a esto: Facebook espera recibir notificación de parte de tus amigos para transformar al usuario en un perfil memorial, Amazon destruye toda información personal y ahora Google tiene su propia alternativa.

Lo grato de la nueva función, llamada Inactive Account Manager, es que le da el control al usuario de planificar el curso de acción deseado. Una de las opciones es traspasar y compartir la información con un familiar o amigo, y la otra es solicitarle a Google que borre la cuenta y con ello todos los datos que contiene.

Lo primero es seleccionar el periodo de espera, que pueden ser tres, seis, nueve o hasta doce meses en los que la cuenta no tenga actividad alguna a través de los servicios de Google o asociados. Luego de eso, debemos tomar una decisión: los usuarios pueden escoger uno o más usuarios para recibir la información de la cuenta, y escoger qué información recibirá cada uno o cuál se conservará o borrará. Podemos controlar lo que sucede con Gmail, Google+, Drive & Docs, Blogger, YouTube, Google Voice y Picasa.

La alternativa de Google es hasta ahora una de las pocas soluciones que ofrece privacidad y seguridad al usuario, una metodología que muy probablemente seguirán otros en corto tiempo.