Esta semana fue el esperado lanzamiento del nuevo smartphone de Samsung. Revisa a continuación qué nos pareció este teléfono.

Este miércoles fue el lanzamiento de uno de los teléfonos más esperados del año. Hablamos del nuevo Galaxy S8, el competidor directo de los equipos de Apple y uno de los equipos más solicitados no solo en nuestra región sino que en todo el planeta. Revisa a continuación nuestra impresión en AETecno de este nuevo equipo presentado por Samsung. 

A primera vista el Galaxy S8 es un dispositivo con un diseño especial. A diferencia de los modelos anteriores de Samsung, este teléfono cuenta con una nueva estructura llamada “infinity display”. Esto significa que cuenta con una pantalla mucho más amplia que otros teléfonos, con bordes prácticamente mínimos y por primera vez, con un botón home háptico incluido en su pantalla.

Este cambio es probablemente el punto más llamativo de este nuevo teléfono. No solo lo diferencia completamente de la competencia, sino que además, es agradable en la mano. En sí, el Galaxy S8 se siente bastante liviano y cómodo durante su uso. Además, gracias a sus bordes redondeados, presentados hace unos años con la versión Edge de estos teléfonos, es fácil manejarlo con una sola mano.

Por otro lado, los materiales se sienten agradables y resistentes al tacto, aunque su parte posterior sigue siendo un imán de huellas digitales y marcas, obligando al usuario a limpiar su estructura de metal recubierto una y otra vez durante el día. Pero bueno, nada que no se resuelva con una carcasa.

A nivel de rendimiento, obviamente no pudimos observar mucho dado que los teléfonos solamente contaban con opciones limitadas de funciones. No obstante, pudimos observar cómo funcionará el sistema Bixby. Este asistente virtual de Samsung, promete tomar información de aplicaciones y uso del teléfono para personalizar la experiencia del usuario con su equipo al máximo. Si bien puede sonar como algo que ya ofrece Siri o Google Assistant, esta tecnología parece ser una apuesta importante para la compañía, ya que el teléfono incluso cuenta con un botón físico para activar este servicio. 

Otro punto interesante del teléfono es su cámara. Si bien mantiene una resolución de 12MP, que no suena especialmente sorprendente. El equipo viene integrado con una tecnología pixel dual, que permite capturas más nítidas, con una mejor calidad de imagen. Además, cuenta con una capacidad de diafragma que alcanza los 1,7/f. Esto significa que permite mejores fotografías en espacios de poca luz. Esto fue algo que obviamente no pudimos probar -la presentación fue a mediodía- pero promete ser una característica importante dentro de este dispositivo.

Teniendo el cuenta las especificaciones que entregó la empresa, junto con nuestra experiencia viendo el teléfono, es evidente que el Galaxy S8 va a ser uno de los tres teléfonos más importantes del año. Una apuesta de parte de Samsung que responde por un lado, al complejo momento que vivió la compañía durante el polémico retiro del Galaxy Note 7, como también a las altas expectativas que mantiene hasta el minuto el próximo iPhone, que cumplirá 10 años en 2017.

Solamente nos queda esperar para tener este teléfono finalmente en nuestras manos, y así poder probar su nivel de rendimiento y uso cotidiano. Sin embargo, al menos por el momento, tenemos altas expectativas del Galaxy S8 para su lanzamiento durante la primera quincena de mayo en Latinoamérica.