Este proceso, ya sea para ambientes de servidores o estaciones de trabajo, sigue evolucionando, innovando y mostrando valor hoy en día, transformándose en un componente esencial de cualquier área de TI.

*Por Sergio Rademacher, Gerente Regional de SONDA Cloud Computing.

Hoy en día la información es uno de los activos más valorados para las compañías, y las exigencias en torno a protocolos de protección, resguardo y privacidad de datos en las diferentes industrias son cada día mayores.  Estas incluso abarcan la manera gestionar la información y su retención de forma prolongada en el tiempo.

Tal vez el principal desafío es la necesidad de resguardar los datos frente a las amenazas de ataques maliciosos como virus o malware que cada día crecen, son más diversos, complejos e inteligentes. Si bien es importante tener un ambiente de seguridad que permita proteger la integridad de los datos, también lo es dar la disponibilidad necesaria en caso de alguna vulnerabilidad nueva o no conocida. 

Por estas razones es importante contar con soluciones que permitan respaldar la información con cierta frecuencia y finalmente poder confiar en que, llegado el momento de algún incidente, corrupción o pérdida en la fidelidad de los datos, podamos retornar en base a dichos respaldos y recuperar la consistencia de la información. 

Es así como las soluciones de respaldo de información han existido desde básicamente el principio del desarrollo de las TI, pero el modelo y estrategia son los que ha sufrido diversas variaciones en el tiempo. 

En estos tiempos es importante entender que frente a una solución de respaldo debemos identificar las siguientes variables: disponibilidad de los datos respaldados, consistencia y servicios. La disponibilidad aborda al nivel de tolerancia frente a fallas de la infraestructura de respaldo y el medio de almacenamiento de los datos, la consistencia se relaciona con la seguridad que nos pueda entregar una solución determinada al momento de restaurar los datos, y, por último, contamos con las diferentes funcionalidades adicionales que simplifican el proceso de restauración y permiten granularidad (especificidad de detalle de los datos) mediante la capacidad de integración con las aplicaciones que deseamos respaldar. 

Las tendencias actuales señalan que los desafíos en el respaldo de la información más comunes están relacionados con la validación de un respaldo exitoso, seguido de la facilidad y la rapidez al momento de recuperar la información.  Ante lo anterior, un 49% de las aplicaciones críticas de las empresas requieren restaurarse en menos de 15 minutos, y un 23% realiza respaldos de estas cada 15 minutos o menos (fuente: Veeam). 

En promedio, el tiempo objetivo de recuperación para las aplicaciones de misión crítica es de 3 horas, cuando las tendencias señalan que la brecha de disponibilidad del servicio debiese reducirse a 1,6 horas. También hay que considerar el punto de recuperación para las aplicaciones de misión crítica 4,2 horas en promedio, cuando debiese ser de 2,9 horas para reducir la brecha de disponibilidad.

El impacto que tiene la indisponibilidad de una aplicación de misión crítica no afecta únicamente la productividad de las organizaciones, sino que puede provocar pérdidas aún mayores. El “Veeam Availability Report 2016” señala que el 68% de las empresas considera que la indisponibilidad de un servicio puede generar pérdidas en la confianza del cliente, y un 62%, que puede dañar a la integridad de la marca. Por lo tanto, al momento de evaluar una solución de respaldo, las empresas deben examinar el impacto que tiene la indisponibilidad del servicio en el negocio, tanto en el presente como en el futuro.  

En la evolución de este tipo de soluciones hay una gama que va desde los respaldos locales hasta soluciones de disco que permiten implementar arreglos robustos donde se combinan medios magnéticos y respaldos en diferentes nubes. Este último caso, que consiste en una combinación de flujo de la información, se conoce como ciclo de vida de los datos en soluciones de respaldo, y permite dar una disponibilidad total al resguardo de la información, ya que esta se encuentra distribuida en diferentes medios.

Al mismo tiempo, las soluciones de respaldo permiten generar chequeos de consistencia de la información respaldada, cumpliendo así el fin principal, que es la restauración de los datos protegidos y asegurar que los datos sean consistentes y útiles. 

Además, hay una serie de funciones que son vitales para facilitar la restauración de un sistema y disminuir los tiempos. Algunas de las más conocidas son aquellas que permiten realizar restauraciones granulares de aplicaciones de bases de datos, correo, file systems, o restauraciones de servidores completos en formatos de imagen en caso de desastre. Otras funciones incorporadas en los últimos periodos consisten en la capacidad de armar un laboratorio completo en base al respaldo sin impactar los ambientes productivos y validar de esta manera la consistencia completa de un sistema que se respalde, o bien el poder encender servidores desde el respaldo directamente sin la necesidad de realizar una restauración, y realizarlo tanto en la infraestructura propia o en alguna nube pública.

Estas últimas muestran que el ámbito de respaldo evolucionando de una solución legacy a ser una de valor para el negocio, permitiendo apoyar fases transversales a la operación como proyectos, implementaciones, QA y desarrollo, testing y otros. Por esto mismo, los respaldos de información, ya sea para ambientes de servidores o estaciones de trabajo sigue evolucionando, innovando y mostrando valor hoy en día, transformándose en un componente esencial de cualquier área de TI.

Al momento de elegir una estrategia de respaldo y de recuperación ante desastres, se debe considerar que esta sea acorde a las necesidades de su negocio, pues este plan involucra mucho más que mantener un data center secundario, sino que también se tiene que considerar lo siguiente: en primer lugar, la diversidad geográfica con el objeto de que el site del failover sea independiente del sitio que se proteja. Segundo, empresas con presencia global pueden requerir de múltiples sites de failover para cumplir con las regulaciones de las regiones en donde están presentes. Tercero, las aplicaciones de negocio pueden tener distintos niveles de protección, por ejemplo, las aplicaciones de misión crítica necesitan ser restauradas más rápido para minimizar las disrupciones en el negocio. Cuarto, es importante probar el funcionamiento del plan de recuperación ante desastres, ya que si esto no funciona puede ser crítico para el negocio. Finalmente, quedarse atrás con la tecnología implica menos protección, mayor complejidad de la recuperación y costos más altos.