Analistas aseguran que Apple se enfrenta a problemas con los componentes del teléfono, que podrían posponer su lanzamiento.

Cromo - El Observador. Varios analistas sostienen que, debido a problemas en la fabricación del iPhone 8, el dispositivo no será lanzado en septiembre, sino pasados uno o dos meses después de su fecha habitual. No obstante, hay quienes creen que se retrasará hasta 2018.

Un informe de ValueWalk indica que los principales retrasos se registran en la cadena de montaje y que solo este año estarán disponibles los iPhone 7S y 7S Plus con mejoras menores.

Otro gran analista del mercado de la telefonía móvil, Ming Chi Kuo, de KGI Industries, asegura que la producción del nuevo smartphone no empezaría hasta octubre o noviembre por un cambio importante en sus características.

Según los analistas, el principal culpable es su cambio de diseño y la dificultad para conseguir suficientes materiales a tiempo. El próximo buque insignia de Apple tendrá un frontal apenas sin bordes, con una nueva pantalla OLED. Además, la empresa está probando nuevas tecnologías en torno a la realidad aumentada y un sensor de huellas dactilares bajo la pantalla.